Muxía
Coruña MuxíaInformación sobre Muxía
En plena Costa da Morte, Muxía es uno de los municipios más visitados de la provincia de A Coruña por albergar uno de los lugares de culto religioso y de interés turístico más destacados de Galicia, el Santuario de la Virgen de la Barca, y por ser el lugar donde finaliza el Camino de Santiago de Fisterra a Muxía. Esta es una villa marinera llena de historia, buena gastronomía, arquitectura religiosa, senderos y naturaleza.
En este bello municipio del rural costero se respira la vida marinera que generaciones de muxianos dedicados al mar han impreso en su puerto, sus casas y calles, su cultura y su rico patrimonio. Todo ello en el marco incomparable de la Costa da Morte, donde el océano Atlántico parece más salvaje y golpea con fuerza las rocas y acantilados, una bravura que solo pueden contener accidentes geográficos tan notables como el cabo de Touriñán, el Punta da Buitra o Punta da Barca. Todos ellos lugares imprescindibles que constituyen auténticos miradores naturales en los confines de las tierras gallegas.
Historia
Tal es la unión de esta villa con el mar que hasta sus cimientos se encuentran directamente sobre la arena. Y es que la mayoría de las casas de Muxía se construyeron sobre la lengua de arena (tómbolo) que da paso a la pequeña península al norte de la localidad, donde se encuentra el Monte Corpiño y Punta da Barca. Se trataba pues de un lugar privilegiado protegido por el propio monte Corpiño y con una gran playa, hoy desaparecida, que servía como embarcadero y otras actividades pesqueras.
Aunque se sabe que Muxía recibió el estatuto de villa hacia el año 1345, su origen no es del todo conocido. Lo que sí es cierto es que debió estar ligado, durante la Edad Media, al monasterio de San Xiao de Moraime, al pazo del Capitán Fernán Álvarez de Carantoña (allegado del Conde de Altamira) y al santuario de la Virgen de la Barca.
A lo largo del siglo XIX la actividad pesquera de Muxía, principalmente centrada en la captura de sardina y congrio, adquirió una mayor relevancia económica y comercial, convirtiéndose en un importante motor del crecimiento de la villa. Pero la verdadera explosión económica de Muxía se produjo a partir de la década de 1970 gracias al descubrimiento del caladero Canto. Esto trajo consigo la completa renovación de la flota pesquera e ingresos que permitieron mejorar notablemente la calidad de vida de sus habitantes.
El 13 de noviembre de 2002 Muxía fue la primera villa de Galicia en sufrir las desastrosas consecuencias del vertido originado por la rotura del casco del barco Prestige, que derramó 77.000 toneladas de petróleo crudo a escasa millas de la costa. Por ello Muxía fue una de las zonas más perjudicadas y considerada como la zona cero del vertido del Prestige. Al ver lo que estaba ocurriendo, los muxianos fueron los primeros en echarse al mar y a las rocas para tratar de limpiar el crudo, sin medios ni más ayuda que sus propias manos y las herramientas de las que disponían en sus hogares. En los días siguientes miles de voluntarios venidos de otras partes de Galicia se sumaron a la “Marea Blanca” de personas que lucharon sin descanso por mitigar los efectos de esta catástrofe medioambiental que afectó de forma directa a tantas personas que viven de los recursos del mar. En el año 2007 se creó el Museo do Voluntariado en honor a la labor de todas estas personas.
Hoy, la villa de Muxía es el epicentro comercial y económico de todo el municipio. Un lugar donde se desarrollan actividades relacionadas con el mar, principalmente la pesca y la venta en la lonja local, y también artesanías tradicionales como el encaixe. El turismo es cada vez más importante en esta villa marinera, centrado sobre todo en su santuario, pero también en su gastronomía y en la singularidad de su emplazamiento en uno de los lugares más salvajes y hermosos de la costa gallega.
Galería de fotos
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Su ubicación
Muxía
Latitud:
43º 6' 15.08" N (43.104189)
Longitud:
9º 13' 5.85" W (-9.218291)
Lo que ofrece Muxía
¿Qué visitar en Muxía?
Museo del Voluntariado por el vertido del Prestige
Este museo fue inaugurado en el año 2007 en honor a la labor de todos los voluntarios que lucharon contra el vertido de crudo del Prestige de 2002, constituyeron la denominada “Marea Blanca” en contraposición con la Marea Negra de petróleo.
Muxía fue la primera zona de Galicia en verse afectada por la catástrofe y también la primera en reaccionar. Una reacción que, al igual que en las demás zonas afectadas, vino de la mano de sus vecinos en primera instancia y de los voluntarios venidos de todos los rincones de Galicia y también de fuera de la Comunidad Autónoma en segunda instancia. La ayuda por parte de instituciones y del gobierno autonómico llegó demasiado tarde. Así es que si no fuera por la labor de los voluntarios las consecuencias del vertido habrían sido todavía peores. Este museo se creó para recordarlo.
El Museo do Voluntariado se encuentra junto a la Praza do Voluntariado, al lado de la praia do Coído. Cuenta con una extensa exposición fotográfica con imágenes del suceso y la labor de voluntarios, así como varias esculturas y utensilios empleados en la limpieza como fundas, botas, guantes o espátulas. Las dos esculturas obra de Soledad Penalta llamadas “Mirando” y “Tardan” son una clara denuncia a la indiferencia e incapacidad de reacción del gobierno autonómico durante la catástrofe.
Santuario da Virxe da Barca
El Santuario da Virxe da Barca es, sin lugar a dudas, el lugar más icónico de Muxía. La iglesia está construida en un cabo, frente al mar, y muy cerca del faro de Muxía. Cuenta la leyenda que aquí es donde desembarcó la Virgen, desde una barca de piedra, para infundir ánimo al Apóstol Santiago en su evangelio.
En las inmediaciones de la iglesia están las “piedras mágicas”, a las que se le atribuyen propiedades curativas y adivinatorias. Son la Pedra de Abalar (piedra de oscilar), Pedra dos Cadrís (piedra de los riñones), Pedra dos Namorados (piedra de los enamorados) y Pedra do Temón (piedra del timón). De acuerdo con la leyenda, estas piedras serían los restos de la embarcación en la que llegó la Virgen por mar.
Caldeiras do Castro
A su paso por el municipio de Muxía, el río Castro conforma auténticas piscinas naturales fruto de siglos de erosión sobre la roca granítica. Las Caldeiras do Castro constan de varias pozas a distintas alturas, con varios saltos de agua entre ellas, e incluso una gran cascada de ocho metros de altura.
Una senda permite transitar por las pozas y cascadas además de otros enclaves de interés turístico y cultural de la zona como la capilla de Santo Outel de O Castro, de estilo barroco y construida en el año 1660, y el crucero del siglo XVIII situado frente a ella.
El acceso a las pozas se puede realizar en coche y existe un área recreativa con mesas y bancos de piedra bajo una arboleda, perfecto para comer a la fresca en los días más calurosos.
Iglesia de San Xiao de Moraime
El antiguo monasterio de San Xiao de Moraime, original del siglo XII, conserva destacados elementos históricos y arquitectónicos de estilo románico que hacen de este lugar uno de los más destacados de Muxía.
En el edificio de planta basilical con tres naves y tres ábsides se encuentran elementos arquitectónicos singulares descubiertos en la década de 1970. Tal es el caso de las pinturas en ocho lienzos halladas debajo de la capa de cal que cubría las paredes interiores de la iglesia. En ellas se representan los siete pecados capitales y la muerte, a la que le disparan sus flechas. Lamentablemente, estas pinturas están en muy mal estado de conservación debido a la humedad.
Otro reciente descubrimiento fue el de la puerta que conecta la iglesia con el monasterio, destaca por su hermoso trazado arquitectónico, adornada con cuatro columnas decoradas con flores de lis y motivos geométricos.
En la fachada principal de la iglesia encontramos un pórtico de forma abocinada con elementos que recuerdan al Pórtico de la Gloria de la Catedral de Santiago. Consta de tres pares de columnas unidas por tres arquivoltas en las que se encuentran talladas varias figuras en forma radial. En el centro se encuentran representados los que podrían ser los Apóstoles en la última cena.
Cabo Touriñán
Un imprescindible en Muxía es contemplar el atardecer desde Cabo Touriñán. Dos veces al año, a principios de la primavera y finales del verano, este es el lugar donde el sol se pone más tarde en toda Europa, y es por ello que se ha ganado el sobrenombre de “el cabo del último sol”.
El cabo, de un kilómetro de longitud, es un auténtico balcón al océano Atlántico, un lugar solitario y de belleza inhóspita que no deja indiferente. La marca del viento marino se puede ver en su vegetación baja y de aspecto almohadillado que contrasta con el azul del mar y la arquitectura simple de su pintoresco faro.
Fiestas y tradiciones en Muxía
Romería de A Barca
Cada año, a principios de septiembre, tiene lugar la romería de A Barca de Muxía, uno de los cultos religiosos más multitudinarios y antiguos de Galicia, ya que sus orígenes se remontan a los del mismo santuario entre los siglos XI y XII. Es, sin lugar a dudas, la romería más importante de A Costa da Morte.
Decenas de feligreses y curiosos venidos de todas las partes de Galicia se congregan en este pequeño y hermoso santuario sobre el mar y las rocas. La tradición dice que hay que oscilar en la Pedra de Abalar, pasar por debajo de la Pedra dos Cadrís, ambas con propiedades curativas y que llaman a la solidaridad de la gente, según se cree.
Con el paso del tiempo la romería de A Barca ha sabido mantener sus seculares tradiciones sin dejar de adaptarse a los tiempos actuales. Así, el sábado por la noche tiene lugar una fiesta con música y baile para todos los vecinos y de la que disfrutan especialmente los jóvenes de toda la comarca.
Mercado de las Rutas del Mar
Este mercado es en realidad una fiesta popular en la que se pone en valor la cultura marinera de Muxía, su gastronomía, oficios y costumbres asociados siempre al mar y a la agricultura; pero también es una festividad dedicada al ocio y el esparcimiento.
Esta singular fiesta, que cada año se celebra durante varios días del mes de agosto, es la ocasión perfecta para conocer las calles de la villa, disfrutar de la mejor gastronomía y conocer de cerca la vida de sus gentes, su cultura y sus tradiciones.
Cómo llegar a Muxía
En coche: Las principales vías de acceso a Muxía son desde el noreste por A Coruña y desde el sudeste por Santiago de Compostela.
- Desde A Coruña: tomar la AG-55 dirección Carballo/Vimianzo/Muxía hasta que la autovía finaliza en la carretera AC-552 (dirección Vimianzo). En Berdoias tomar la AC-440 sin desvíos hasta Muxía.
- Desde Santiago: en el sur de la ciudad tomar la autovía AG-56 (hacia Noia). Tomar la salida 7 hacia la carretera AC-544 en dirección Bertamiráns Norte/Negreira/Ames. Continuar por la AC-546, AC-441 y AC-440 todas en dirección Muxía.
En autobús: existe una línea de Muxía a Santiago con la compañía Ferrín.
Los aeropuertos más cercanos son el de Lavacolla (Santiago), a 83 kilómetros de distancia, y el de Alvedro (A Coruña) a 99 kilómetros.
Ficha técnica de Muxía
Nombre Completo | Muxía - A Coruña |
Dirección | Rúa Real, 35, 15124 - Muxía (A Coruña) |
Teléfono | +34 981 742 001 |