Acantilados de Loiba
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La costa de Loiba se ha hecho famosa gracias al primer “Mejor banco del mundo”, un lugar de impresionantes vistas panorámicas a los acantilados, la ría de Ortigueira y el cabo Ortegal al frente. Sin lugar a dudas, este lugar por sí solo ya merece una visita, pero lo cierto es que en este paraje de la parroquia de San Julián de Loiba, en el municipio de Ortigueira, encontrarás muchos otros enclaves de interés paisajístico, natural y etnográfico.
Los acantilados de Loiba se alzan en la confluencia de la serra da Faladoira – Coriscada con el inmenso océano Atlántico. Enormes moles rocosas se yerguen verticales sobre el mar, alcanzando los 100 metros de altura, y funcionando como un auténtico mirador natural que configura un espectacular paisaje costero que merece ser visto en cualquier época del año. Bajo los acantilados se ubican varias calas y playas vírgenes, la mayoría de difícil acceso, como la de O Picón, O Coitelo, Praia de Fábrega, Furada, Praia do Carro o Praia de Sarridal, entre otras.
Durante el invierno y la temporada baja Loiba es un lugar tranquilo y solitario donde se respira el aire húmedo del mar, perfecto para una buena caminata con la única compañía del viento, el canto de las aves marinas y, quizás, el encuentro con algún vecino de la zona o una de las mujeres recolectoras de algas, las llamadas algueiras.
El mejor banco del mundo
La historia del banco de Loiba es muy curiosa y merece ser conocida. Y es que la existencia de este banco se la debemos a un vecino de Loiba, Rafael Prieto Fernández, que en el año 2009 decidió colocar por su cuenta un banco en este lugar, el más bello de la zona. Poco después, un grupo de músicos escoceses que actuaban en el Festival de Ortigueira visitaron este lugar y escribieron en su respaldo The best bank of the world. Una inscripción que muchos interpretaron como “El mejor banco del mundo”, aunque la palabra bank en inglés hace alusión a la costa o a un lugar de desembarco.
En cualquier caso, este banco se hizo conocido internacionalmente gracias a una impresionante fotografía que Dani Caxete tomó desde este lugar, y que obtuvo en 2015 una mención especial en un importante concurso organizado por la UNESCO en el que se reivindican los cielos nocturnos libres de contaminación lumínica.
Desde entonces, la inscripción The best bank of the world se mantiene en la parte trasera de este banco y se reescribe siempre que es necesario. La mejor manera de llegar a este lugar es caminando por la conocida como la “Ruta de las algas”, de la que os hablamos a continuación.
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Su ubicación
Acantilados de Loiba - Ortigueira
Latitud:
43º 44' 39.53" N (43.744313)
Longitud:
7º 45' 9.26" W (-7.752571)
Lo que ofrece Acantilados de Loiba
Rutas por los acantilados de Loiba
Prácticamente la totalidad de la costa de Loiba es accesible por medio de pistas forestales y senderos, muchos de ellos señalizados. Además, se han instalado varios miradores en los mejores puntos para observar el paisaje, y también hay un área de autocaravanas.
Ruta de las algas o ruta de las algueiras
A pesar de estar en plena costa, Loiba siempre ha sido una zona de alta actividad agrícola y los pequeños arenales bajo los acantilados proveían abundantes cantidades de alga roja que eran recolectadas en los meses de verano para utilizarlas como abono para los campos de cultivo. Aunque en la actualidad la agricultura ya no es una actividad principal de la que depende el sustento de los vecinos, la recolección de algas se sigue realizando para su venta a la industria farmacéutica, alimentaria y cosmética. Es un trabajo realizado casi exclusivamente por mujeres, las llamadas algueiras.
Así, si realizas esta ruta entre junio y octubre es muy probable que veas a estas mujeres recogiendo algas tal y como lo hacían sus antepasados. Una curiosa estampa configurada por las algueiras junto a sus burros, que suben con las alforjas llenas de algas las empinadas cuestas hasta la cima de los acantilados. Un oficio tradicional, respetuoso con el medio, que contribuye al desarrollo rural de Galicia y que, además, ha encontrado continuidad sirviendo como recurso para cumplir las demandas actuales.
Pero la actividad de estas mujeres no es la única que se continúa desarrollando en la zona. La pesca y el marisqueo también se practican entre acantilados. Una muestra de ello es un singular y diminuto embarcadero encajado entre enormes rocas cuya sola vista hace entender el duro trabajo de los marineros del lugar.
La ruta de las algas está inmersa en un paraje de naturaleza protegida por la Red Natura. Una sucesión de pronunciados acantilados y playas vírgenes que albergan importantes comunidades de peces, mariscos, algas, plantas y aves que encuentran aquí la zona ideal para anidar. Las rocas de filitas y esquistos adquieren aquí caprichosas formas que se antojan monumentales y en ocasiones misteriosas y extrañas.
Información de la ruta:
- La ruta de las algas de Loiba es lineal, con una longitud de 6,8 km, y está señalizada con pivotes de madera. El punto de partida se encuentra en el “acceso a Ribeira do Carro” y finaliza en la pasarela playa de Esteiro.
- Para llegar aquí puedes tomar el desvío hacia Picón desde Loiba, en el kilómetro 63,3 de la AC 862. Después sigue la señalización que indica Pena Furada. La pista asfaltada concluye donde se inicia esta ruta.
- Es posible realizar una visita concertada para compartir una jornada de trabajo con las mariscadoras, los marineros y las algueiras. Para ello tendrás que contactar con el Centro de interpretación y recepción de visitantes ubicado en el puerto de Ortigueira, junto al Paseo Barro Soto, o con la oficina de turismo de Ortigueira (Lagarea, s/n. Teléfono 981 422 089. email: turismo@concellodeortigueira.com).
Ficha técnica de Acantilados de Loiba
| Nombre Completo | Acantilados de Loiba |
| Dirección | Ortigueira - A Coruña |
| turismo@concellodeortigueira.com | |
| Teléfono | +34 981 422 089 |