Cascada de Segade

Fervenza es la denominación que se le da en Galicia a las cascadas. Una de las más mágicas de la provincia es la cascada de Segade, en el municipio de Caldas de Reis. Junto con su entorno creerás que estás viviendo una especie de cuento. Un lugar de fantasía, sin duda. Además, como no se trata de un sitio demasiado masificado para lo precioso que es, es muy posible que lo encuentres totalmente tranquilo y puedas disfrutar de un remanso de paz perfecto para desconectar en el medio del río Umia.

Un entorno mágico de obligada visita

El entorno está lleno de pozas formadas por el salto de agua y un paraje natural endulzado por la vegetación y los peñascos, con los que tendrás que tener cuidado si quieres conocer bien la zona merodeando y así conseguir buenas vistas desde distintas perspectivas. Sobre todo, si vas con cámara fotográfica o de vídeo. En este sentido, caminar por las pequeñas rocas puede resultar un poco peligroso y deberás tener extremo cuidado. Por eso, en épocas de temporal o fuertes lluvias no es recomendable desplazarse hasta este lugar.
Otro atractivo que hay en este entorno, además de la cascada, sus pozas y el entorno del río, son las ruinas de la antigua fábrica de Luz de la zona, que producía electricidad a partir de energía hidráulica. También, justo al lado del salto, podrás observar un estupendo mirador desde donde ver la zona con una buena perspectiva. Otro patrimonio etnográfico en la zona son sus antiguos molinos, de los que hablaremos a continuación, dentro de una ruta que os proponemos para conocer este encantador paraje natural.

Si te gustan las fervenzas, puedes visitar nuestro post las mejores cascadas de Galicia.