Las operaciones en verde sobre el viñedo
El cultivo de la vid y las labores agrícolas necesarias para mantener el viñedo sano y obtener vendimias de calidad están profundamente marcadas por el clima. El clima gallego es en muchos sentidos beneficioso para las vides pero tiene la particularidad de favorecer la aparición de enfermedades provocadas por hongos (enfermedades criptogámicas). Estas y otras peculiaridades de Galicia son la base de la necesidad de practicar deshojados y podas en verde, aunque en realidad estas tareas se realizan también con otras finalidades.
Las operaciones en verde se pueden definir como las intervenciones que se realizan en las partes verdes de la vid, esto es, sobre las hojas, los pámpanos y los racimos verdes. Es por ello que las operaciones en verde se llevan a cabo durante la primavera y el verano, que es cuando la vid está en pleno crecimiento vegetativo y el momento en el que más desarrolla su parte aérea.
El objetivo principal de las operaciones en verde es dotar a cada cepa de un mayor equilibrio vegetativo-productivo, es decir, que el número y la disposición de los racimos sea acorde con el número de hojas y ramas (pámpanos) de la planta. Con ello se busca mejorar la maduración de los racimos, asegurando su aireado y adecuada insolación, y que la planta sea capaz de proporcionar los azúcares y nutrientes que precisan los frutos. Esto tiene consecuencias muy beneficiosas y directas en la calidad de la uva, de los mostos y, por tanto, de los vinos. Las operaciones en verde son labores necesarias para la obtención de auténticos vinos de calidad.
Además, al conseguir que el sol y el aire penetren en la parte aérea de la vid, se reduce considerablemente la incidencia de enfermedades fúngicas, como el Mildiu o el Oidio. Esto resulta tremendamente importante en Galicia, donde el clima húmedo y de temperaturas suaves contribuye al crecimiento de hongos patógenos, especialmente en primavera.
Las operaciones en verde son importantes en todo tipo de viñedos, sea cual sea su ubicación y sistema de producción, pero son especialmente importantes en los viñedos que practican la agricultura ecológica y otros sistemas de producción sostenibles ya que es la mejor forma de evitar o al menos limitar el uso de fungicidas.
En el caso de Galicia, debido a las condiciones climáticas y atmosféricas que condicionan el cultivo de la vid, las operaciones en verde son especialmente importantes para mantener a raya al Mildiu, el Oidio y otras enfermedades criptogámicas que son bastante frecuentes en los viñedos gallegos.
Aclareo de los pámpanos y eliminación de chupones
El despampanado consiste en eliminar los brotes que se desarrollan a partir de las raíces, los chupones que crecen a lo largo de la cepa y los pámpanos no productivos, es decir, aquellos que no darán frutos. Para evitar provocar heridas en las vides, estas operaciones se realizan pronto, cuando los brotes están todavía tiernos, en primavera.
Con ello se consiguen varios objetivos fundamentales. Por un lado se reduce el exceso de vegetación que causa acumulación de humedad en el interior de la planta, con el consecuente riesgo de infección por hongos. Por otro lado se reduce el efecto sombra que producen los pámpanos más exteriores a expensas de los más interiores, limitando la capacidad de realizar fotosíntesis en las partes más internas de la cepa. También se consigue una mejor maduración de los racimos, ya que al haber menos partes jóvenes en crecimiento no productivo, la planta destinará más azúcares y nutrientes a los frutos durante la maduración.
Aclareo de racimos
El aclareo de racimos, o cosecha en verde, consiste en eliminar racimos completos de la vid con la finalidad de mejorar la maduración de los demás racimos. Esta es una operación que se realiza sólo bajo ciertas circunstancias concretas, esto es, cuando existe un desequilibrio productivo-vegetativo importante y claramente a favor de la parte productiva. Es decir, que esta operación se realiza cuando las vides tienen un número de racimos superior a lo que la propia planta es capaz de soportar, ya que su número de hojas y capacidad fotosintética no es suficiente para aportar a las bayas todos los azúcares que necesitan para madurar correctamente.
El mejor momento para el aclareo de racimos es al inicio del envero, ya que si se realiza en este momento se acelera el proceso de maduración de los racimos que quedan en la planta sin afectar a las dimensiones de las bayas. Si se realiza mucho antes se corre el riesgo de obtener racimos pequeños y con un mayor número de bayas que no maduran bien.
Deshojado de las vides
Esta operación consiste en eliminar las hojas próximas a los racimos, especialmente las hojas más viejas y grandes, cuando el racimo ya está en maduración. Con ello se consigue ventilar los racimos reduciendo la incidencia de enfermedades fúngicas y aumentar su exposición al sol, facilitando así su maduración y la síntesis de compuestos polifenólicos en las variedades tintas.
Pero además, al quedar los racimos más expuestos, se facilita la aplicación de tratamientos fitosanitarios y también las operaciones de vendimia.