Arquitectura y majestuosidad
Los monasterios de las Rías Bajas son un referente de arquitectura milenaria en parajes de gran belleza natural. Todos ellos se encuentra en formidable estado de conservación, permitiéndonos admirar la arquitectura románica, gótica y barroca en toda su plenitud.
Muchos de ellos continúan siendo importantes lugares de culto, y algunos se encuentran el ruta del Camino Portugués a Santiago y su variante por la costa. Os hablamos a continuación de la Ruta de los Monasterios de Pontevedra comenzando por el sur, muy cerca de la frontera con Portugal, y viajando hacia Santiago de Compostela en el norte.
Monasterio de Santa María de Oia
Casi en el extremo más al sur de la costa de Galicia, en el municipio de Oia, se encuentra este monasterio que es uno de los lugares de culto más destacados de la variante costera del Camino Portugués a Santiago.
El Monasterios de Santa María de Oia corona las rocas majestuoso frente al salvaje océano Atlántico, ofreciendo una de las visiones más espléndidas de toda la comarca. Se trata del único monasterio de toda la provincia situado a pie de mar, y ha sido protagonista en la defensa contra la piratería además de jugar un papel muy importante en el traslado del cultivo de la vid a la zona. En el año 1931 fue declarado Monumento Nacional.
Aunque no se sabe con exactitud, algunas fuentes datan su fundación a principios del siglo X. Fue habitado y administrado por monjes y abades hasta el siglo XIX y a principios del siglo XX los jesuitas fundaron aquí un colegio. Actualmente este monasterio es de propiedad privada.
El formidable edificio se encuentra rodeado de murallas, una muestra de su papel defensivo a lo largo de la historia, y en su interior cuenta con un gran patio central rodeado de galerías con arcos de medio punto y bóvedas nervadas. En definitiva, este monasterio es una auténtica joya arquitectónica, tanto por dentro como por fuera, ubicado en un paraje de naturaleza espectacular.
San Salvador de Lérez
Muy cerca de la desembocadura del río Lérez, frente a la ciudad de Pontevedra, se halla el Monasterio de San Salvador de Lérez, también conocido como San Benito de Lérez, ya que en su fachada muestra una imagen del Santo en una hornacina. Fue declarado Monumento Nacional en el año 1946.
Aunque no se conoce la fecha exacta de su fundación, se cree que fue a finales del siglo X por el Rey Ordoño II de Aragón en favor del Abad Guntado. En el año 1661 se funda aquí un importante Colegio de Artes que dota al Monasterios de gran relevancia y prestigio en la época.
En el interior sobresale su magnífico retablo del altar mayor de estilo barroco y con la imagen de San Benito, posiblemente de principios del siglo XVI; y los hermosos retablos dorados de Santa Lucía y del Corazón de Jesús, construidos entre 1757 y 1761 por el Abad Fray Benito Gesto.
En el exterior, además de su imponente fachada, destaca su particular galería con doble arquería adosada a uno de sus muros y la Capilla de San Benito. El 21 de marzo de cada año, en este lugar se rinde culto al San Benito con una romería en honor a su fama “milagrera”.
Siguiendo el curso del río Lérez aguas arriba, en el municipio de Cerdedo-Cotobade, se encuentra el Monasterio de San Pedro de Tenorio. Una edificación medieval cuyo Claustro del siglo XVI, tiene dos alturas y tres alas que recuerdan a las del Monasterio de San Salvador de Lérez. Además de su belleza arquitectónica, este Monasterio se encuentra en un paraje de gran belleza natural al que merece mucho la pena acercarse.
Monasterio de San Xoán de Poio
El también conocido como el Monasterio de Poio se encuentra en el municipio homónimo, muy cerca de la ciudad de Pontevedra. Se trata de uno de los monasterios más grandes de la provincia y se encuentra en lo alto de una colina con preciosas vistas a la Ría de Pontevedra. Fue declarado Monumento Nacional en el año 1971.
Aunque se desconoce su origen exacto, los escritos más antiguos que constatan la existencia del monasterio datan del año 942. Aunque pasó por una época de decadencia, a finales del siglo XIX los monjes que aquí se instalaron recuperaron y reformaron la iglesia y la biblioteca, que se encuentra perfectamente conservada, y comenzaron a impartir clases devolviendo así la vida y el esplendor al monasterio.
Desde el exterior, el tamaño y la arquitectura del edificio con su gran fachada barroca ya impresionan, pero lo mejor se encuentra en el interior. Al entrar nos sorprende su gran bóveda de cañón del siglo XVIII y su hermosos retablo mayor de estilo barroco, lleno de imágenes de santos y ornamentaciones sobre columnas salomónicas. En el claustro del Cruceiro se encuentra un impresionante mosaico del Camino de Santiago, diseñado en el siglo XX, y que mide 80 metros de largo y 2,5 de alto, una auténtica maravilla.
Monasterio de Armenteira
Muy cerca del Monasterios de Poio, en un precioso enclave rodeado de montañas y viñedos, se encuentra el magnífico Monasterio de Santa María de Armenteira, en el municipio de Meis. Fue declarado Monumento Nacional en 1931.
Este monasterio data del siglo XVIII y fue un importante impulsor del cultivo de la vid en la que ahora es la subzona de mayor producción de vino de Albariño en la DO Rías Baixas, el valle del Salnés. Tras varios años de abandono, se recuperó y reconstruyó en 1961 gracias a Carlos del Valle, hijo del célebre escritor Ramón María del Valle-Inclán, y hoy en día está habitado por monjas benedictinas.
En el interior del monasterio destaca su hermoso baldaquino que cobija a la Virgen de las Cabezas sujetando al niño con un pecho desnudo, en una talla de madera policromada que data del siglo XVI, siendo pues anterior a la construcción del monasterio. Cada año se rinde culto a la virgen con la celebración de una romería, de gran importancia en la zona, en el mes de abril. Otro espacio notable es el claustro del monasterio, que se encuentra rodeado de bóvedas nervadas decoradas con claves en su parte central.
Monasterio de Santa María de Aciveiro
A los pies de la sierra do Candán, en el entorno de hermosos paisajes de Forcarei, se halla el Monasterio de Santa María de Aciveiro que es a día de hoy una hospedería e iglesia. Fue declarado Monumento Nacional en 1931.
Este monasterio fue fundado en el año 1135 y los monjes que lo habitaban sacaron partido de los neveros de la zona, lugares donde se conservaba la nieve invernal durante largos periodos de tiempo, de los que obtenían ingresos. Hoy en día el Monasterio de Acibeiro pertenece a la Asociación de Monasterios del Císter de Galicia y a la Red Europea de Abadías y Sitios Cistercienses.
Sin duda, merece mucho la pena acercarse a este monasterio para disfrutar de su bella arquitectura y su espectacular entorno natural, en el que además se puede practicar senderismo u otras actividades al aire libre.
Monasterio de Carboeiro
A poco más de 20 kilómetros del Monasterio de Aciveiro se halla uno de los más pintorescos de toda Glaicia, el Monasterio de San Lourenzo de Carboeiro, en el municipio de Silleda. También nombrado Monumento Nacional en 1931.
Su fundación data de la segunda mitad del siglo X, siendo por tanto el más antiguo de la Ruta de los Monasterios de Pontevedra. Tras sufrir varios años de abandono, actualmente se está rehabilitando poco a poco. A pesar de ello merece mucho la pena acercarse hasta aquí ya que se trata de un lugar con mucho encanto, enclavado entre bosques y montañas a orillas del río Deza. A escasos 100 metros del monasterio encontramos el Ponte do Demo (puente del demonio) del siglo XVII, y que fue en su momento una importante zona de paso que comunicaba Silleda con la vecina Vila de Cruces.
En el exterior del edificio, además de su espectacular entorno, destaca el rosetón de la fachada. Pero el interior quizá sorprenda todavía más, y es que una preciosa arquería de medio punto permite el paso de la luz desde la girola hasta el presbiterio. Con esta luz canalizada se destacan los contornos de la arquitectura gótica en un espacio lúgubre y pétreo que, sin lugar a dudas, merece ser visto y admirado.