Las moras de las silvas o silveiras
Las moras silvestres son los frutos de la zarzamora, denominada silva o silveira en gallego, un arbusto de la especie Rubus ulmifolius muy frecuente en toda Galicia. Prácticamente no hay un gallego que haya comido sus frutos o que no se haya enganchado la ropa con las espinas de esta planta. Y es que los frutos de la silveira, las moras, son los frutos del bosque que más abundan en Galicia.
El nombre científico de la planta, Rubus ulmifolius, deriva del latín ruber, que significa rojo; y ulmifolius, que hace referencia al parecido de sus hojas con las del olmo. Es un arbusto con espinas de la familia de las Rosáceas. No se debe confundir con los frutos de los árboles del género Morus (Morus nigra y Morus alba), también denominados moras.
Las zarzas o zarzamoras crecen prácticamente en cualquier terreno, especialmente en el sotobosque, en los márgenes de los caminos y en campos abiertos. Es una planta de crecimiento rápido que también se multiplica vegetativamente generando raíces desde sus ramas. Por ello muchos la consideran invasiva, pero lo cierto es que suele colonizar terrenos abandonados y márgenes de caminos.
Los frutos de Rubus ulmifolius están formados por pequeñas drupas arracimadas y unidas entre sí, llamadas polidrupas. Al principio son de color verde pálido, después tornan a rojo y finalmente a negro cuando están maduras y listas para comer. La planta florece de mayo a agosto, siendo sus flores una importante fuente de néctar para las abejas melíferas.
Las moras maduran hacia finales de verano. Lo habitual es recogerlas a finales de agosto y principios de septiembre, aunque según el tiempo que haga durante el verano a veces se pueden recolectar antes o después de estas fechas. Existe una leyenda dice que las moras no se pueden recoger más allá del 29 de septiembre. Se dice que ese día el Arcángel San Miguel expulsó a Lucifer del cielo, cayendo éste sobre una silveira y, enfadado, orinó sobre la planta. Algunas versiones dicen que en lugar de orinar escupió sobre ella. En cualquier caso, lo cierto es que a finales de septiembre las moras suelen estar sobremaduras o incluso podridas y cubiertas de una capa de moho.
Usos de la silveira en Galicia
Las silvas o zarzas son y han sido plantas de especial valor cultural en Galicia, tanto por su abundancia como por sus usos comestibles y medicinales.
La densidad de estas plantas puede ser extremadamente elevada en algunas zonas de Galicia y, en consecuencia, la producción de moras también. Muchos gallegos salen a recoger las moras al campo para hacer uso como comestible, bien para consumirlas en fresco, bien para hacer mermeladas y postres.
Por su sabor dulce, las moras son muy empleadas para la preparación de mermeladas en muchos hogares gallegos, pero también en la pastelería para la preparación de postres y, a veces, se elaboran vinos y licores.
Tradicionalmente también se hacía uso de sus hojas desecadas que se empleaban para preparar infusiones por sus propiedades medicinales. Hoy se sabe que las hojas de la zarza tienen propiedades astringentes, antisépticas, urinarias y diuréticas. Además, contiene vitaminas A, B y C, sales minerales y flavonoides que ayudan a disminuir el colesterol.
Otro uso tradicional que se hacía de la silveira era emplear las cortezas de los tallos, resistentes y flexibles, como material de cestería y para hacer cuerdas con las que se ataban escobas y se unían haces de paja y cereales.
Actualmente los usos medicinales y como fuente de materiales para cestos y cuerdas han caído en el abandono. Sin embargo el uso alimentario de sus frutos, las moras, siguen vigentes en toda Galicia e incluso han adquirido mayor importancia en algunas zonas. Lo cierto es que es un fruto de extraordinarias propiedades nutricionales y culinarias que ofrecen todo un mundo de posibilidades para los amantes de la repostería.