Productos típicos y (casi) exclusivos de Galicia
La gastronomía gallega está basada en sus productos de excepcional calidad. Algunos de ellos, como el pescado, los mariscos y las carnes, son ampliamente conocidos más allá de nuestras fronteras. Son muchos los productos gallegos que se exportan a toda España y también a otros países pero algunos, como de los que os hablamos a continuación, solo se pueden encontrar en Galicia.
Los motivos por los que solo se pueden encontrar en estas tierras son, además de lo evidente (que sólo se producen aquí), que se trata de productos frescos y de producción limitada por lo que se destinan a la venta en mercados locales. Además, su demanda es mayor que su oferta, y por ello se acaban en muy poco tiempo. Así que si quieres probar alguno de estos productos frescos y de temporada exclusivos de Galicia te recomendamos que prepares las maletas y visites nuestras tierras para disfrutar de una experiencia gastronómica de primera.
Grelos
Los grelos son las hortalizas más representativas de Galicia y están presentes en platos tan típicos como el cocido, el caldo gallego o el propio lacón con grelos. Estas verduras no son ni más ni menos que el brote floral de los nabos. Antiguamente en Galicia los nabos se utilizaban para dar de comer al ganado mientras que sus brotes eran para consumo humano. Así, los grelos tienen una estrecha relación con las nabizas, pero no son exactamente lo mismo. Las nabizas serían los primeros brotes antes de la floración, mientras que los grelos son las hojas más tardías con los brotes florales.
La palabra “grelar” en gallego significa florar, y es por ello que a estas verduras se las denomina grelos. Es en ese momento cuando se cosechan los grelos, generalmente entre enero y marzo, por lo que siempre coinciden con las fechas del Carnaval, y de ahí la tradición de degustar un buen lacón con grelos en esta festividad.
En el año 1996 los grelos, como hortalizas típicas de Galicia, fueron recogidos en el Inventario Español de Productos Tradicionales. Más de una década después, en 2009 nace la Indicación Geográfica Protegida “Grelos de Galicia”, o IXP Grelos de Galicia. Esta figura de protección del origen y calidad de los grelos ampara a las producciones de variedades autóctonas que se obtienen en todo el territorio de Comunidad Autónoma. Actualmente existen varias empresas que comercializan grelos de Galicia en conserva que se venden en los mercados gallegos y también fuera de Galicia, si bien el producto fresco solo se encuentra dentro de la CCAA.
Pimientos de Herbón
Muchos los denominan pimientos de Padrón pero lo cierto es que los pimientos de la IGP Pemento de Herbón son en realidad pimientos de la variedad padrón cultivados en su lugar de origen, es decir, los auténticos pimientos de Padrón. Dado su cultivo artesanal y restringido al área concreta de origen, cada año se producen cantidades limitadas que se venden principalmente en los mercados de la zona, es decir, en Padrón y en otros ayuntamientos cercanos como Santiago de Compostela.
En concreto, las zonas amparadas por la DOP Pemento de Herbón son las constituidas por los municipios coruñeses de la comarca de O Sar: Padrón, Dodro y Rois; y los municipios pontevedreses de Pontecesures y Valga, ambos enmarcados en la comarca de Caldas. Los agricultores de la zona aplican sus conocimientos transmitidos durante generaciones al cuidado y cultivo de estos maravillosos frutos. Solo ellos saben seleccionar los de mejor calidad, algo que hacen en todo momento para que al consumidor lleguen sólo los mejores pimientos. Los auténticos pimientos de Herbón se cosechan a mano de mayo a octubre, por lo que se encuentran en el mercado principalmente durante el verano.
Así, no es fácil encontrar los auténticos pimientos de Padrón más allá zona de producción y localidades limítrofes e incluso en Galicia se consumen pimientos de Padrón cultivados fuera de su zona de producción. Sobra decir que la mayoría de los pimientos de Padrón que se encuentran en supermercados de toda España no gozan del amparo de la Indicación Geográfica Protegida Pemento de Herbón y que su sabor y características no son para nada igualables a los originales.
Lamprea
Este feo pez prehistórico puede resultar desagradable a la vista pero muchos lo consideran una auténtica delicia. Galicia es la única zona de toda Europa donde está permitida la pesca de la lamprea, ya que es un animal en peligro y solamente el río Miño alberga una población suficiente para su explotación. La pesca tradicional de la lamprea se remonta a los tiempos de la ocupación romana y se sigue realizando del mismo modo en los denominados pescos o pesqueiras: estructuras de piedra sobre el cauce del río que permiten la captura de este animal cuando remonta las aguas para reproducirse.
Las localidades de la zona transfronteriza del río Miño, cerca de su desembocadura, tales como Salvaterra do Miño, As Neves, Arbo o Crecente son las que gozan de mayor tradición “lampreeira”. La captura de la lamprea suele comenzar a principios de febrero y se prolonga hasta finales de abril, y es en estos meses en los que podremos degustar este exquisito manjar en muchos restaurantes del sur de la provincia de Pontevedra.
La villa de Arbo es considerada la capital de la lamprea en Galicia y aquí tiene lugar la “Festa da Lamprea” a finales de abril, una ocasión ideal para probar este producto típico a precios muy razonables. Además del producto fresco, que se cocina preferentemente en su propia sangre (lamprea a la bordalesa), en Galicia también es tradicional secar la lamprea y rellenar la de huevo duro, jamón y pimiento morrón. Cada año en tierras de Arbo también tiene lugar la “Festa da lamprea seca” en el mes de agosto.
Los chinchos y las xoubas
Los chinchos y las xoubas fritas (pescaditos fritos) son dos de las tapas y raciones más solicitadas del verano en Galicia. Los chinchos son jureles pequeños y las xoubas (también denominadas parrochas) son pequeñas sardinas. Ambos pescados están disponibles la mayor parte del año en las plazas y mercados de Galicia pero es en los meses de mayo a octubre cuando alcanzan su plenitud de sabor y contenido graso y por ello en verano están siempre deliciosos.
En Galicia, tanto las xoubas como los chinchos se pescan mediante artes tradicionales y su abundancia se puede ver cada mañana en los mercados y lonjas de las rías gallegas. Uno de los principales destinos de estos pescaditos son los bares y restaurantes, donde se sirven fritos acompañados de pan gallego o cachelos y es costumbre degustarlos también en compañía de otros platos típicos como los pimientos de Padrón o la empanada. Tal es el éxito de los chinchos y las xoubas que, en Galicia, parece que no es verano si no tomamos una ración de estos pescaditos acompañada de un buen vino blanco de las Rías Baixas.
Mirabeles
Aunque no es originaria de Galicia, esta variedad de ciruelo de frutos pequeños, dulces y muy sabrosos, obtiene excelentes producciones en algunas zonas del territorio gallego. Este fruto es una delicia al alcance de pocos, ya que no cualquier zona es apta para su cultivo y buena maduración. Es un producto codiciado por su sabor y textura pero que es muy difícil de encontrar fresco en el mercado.
El fértil valle del río Miño goza de un microclima que aporta las condiciones idóneas para el cultivo del mirabel. Así, en las comarcas del Rosal y el Baixo Miño (cerca de la desembocadura), y en menor medida también en el Ribeiro, se producen la mayoría de mirabeles de Galicia.
Conocido como el tesoro dorado de Galicia, esta fruta es considerada una auténtica exquisitez gastronómica y es muy difícil hallarla fresca más allá de esta Comunidad Autónoma. Los mirabeles se recolectan en verano y la temporada apenas dura un mes: desde mediados de julio a mediados de agosto. Sin embargo, su venta en los mercados no suele prolongarse más de dos semanas y se acaban rápidamente dada su gran demanda. Además, una buena parte de la producción se destina a la elaboración de conservas en almíbar, también consideradas una exquisitez culinaria, y que permiten disfrutar de este gran producto durante todo el año, además de transportarlo más allá de su zona de producción.